Mauro Camoranesi es el último argentino campeón del Mundo de Selecciones. En su primer Mundial (Alemania 2006), dio la vuelta olímpica con la Selección Italiana.
Por Diego Jolodovsky, socio del CIHF.
Las sorpresas que da la vida. Mauro Germán Camoranesi, jugador de Banfleld, Lanús y Racing Club de Avellaneda, se consagraba el 9 de julio de 2006 con la selección italiana como Campeón del Mundo al vencer por penales a Francia en el recordado partido disputado en la ciudad de Berlín, aquel 9 de julio de 2006.
Las buenas temporadas en Verona y en Juventus hicieron que el mediocampista surgido en Aldosivi de Mar del Plata, con pasaporte italiano sea considerado por Marcello Lippi como convocado para la Selección Azzurra con vistas al Mundial.
Y el argentino hizo su presentación con la camiseta italiana oficial el 9 de octubre de 2004 por las Eliminatorias frente a Eslovenia. En ese partido fue titular y salió a los 38 minutos de la etapa complementaria. Italia cayó de visitante 1-0.
Jugó seis partidos en esas Eliminatorias rumbo a Alemania, hasta que llegó el gran día. En Hannover el 12 de junio cuando a los 11 minutos del segundo tiempo tuvo que reemplazar a Francesco Totti frente a Ghana. Triunfo 2-0, y nacía la ilusión del título.
Diez días después a Camoranesi le llega el turno del debut de titular. Frente a República Checa en Hamburgo. No la desaprovechó. El mediocampista estuvo en los primeros 74 minutos del partido en el triunfo también por dos goles a cero. El ex volante de Banfield fue reemplazado cuando Italia estaba en ventaja 1-0.
Llegaron los octavos de final y otra vez el tandilense fue titular. También le tocó dejar la cancha en el segundo tiempo en la goleada frente a Ucrania por 3-0. Estuvo en 68 minutos de partido.
Descansó en los cuartos de final, y Marcello Lippi dispuso que vuelva en las semifinales. 4 de julio en Dortmund frente a los locales. Alemania. Jugó los noventa minutos del partido regular que igualaron sin goles. Fue reemplazado al iniciarse el alargue cuando Italia logró liquidar el pleito y clasificarse a la final del Mundial luego de 12 años.
El choque esperado fue el 9 de julio. Frente a la Francia de Zinedine Zidane estuvo presente en el partido que todo hombre quiere jugar. La final de una Copa del Mundo. La cita fue en Berlín y salió reemplazado por Alessandro Del Piero a los 41 minutos de la segunda parte. El resultado no se alteraría. Fue 1-1 en los 90. No hubo goles en los treinta minutos de suplementario. E Italia gritó campeón al imponerse por 5-3 en la definición penales.
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