Muestra en Museo de Gimnasia

El sábado 11 de noviembre se llevó a cabo la ya clásica Noche de los Museos en la ciudad de La Plata, denominada desde que es organizada por la UNLP “Museos a la luz de la luna”.

Por Leandro Baschar, socio del CIHF.

 

En ese marco, el Museo del Club de Gimnasia y Esgrima La Plata, situado en su Estadio, abrió sus puertas integrando los circuitos de exposición por sexto año consecutivo, en una emotiva jornada.

En esta oportunidad, la Muestra fue de una temática particular, que se sumó a la exposición estable del Museo. Se trató de “Embarcate en la Gira del Gimnasia campeón”, una recorrido con piezas históricas, fotos inéditas, álbumes (entre ellos uno donado recientemente por la familia Naón) y proyecciones, sumado a música de época y comidas típicas de los países visitados, para darle un tinte de verdadero viaje en el tiempo a una noche que quedará en el recuerdo para las más de 500 personas que se acercaron entre las 19 hs y la medianoche.

En lo que hace a la investigación, se montaron los 27 partidos disputados con sus fotos, extractos de noticias, declaraciones de los protagonistas, goleadores y formaciones.

La “formación ideal” de la Gira fue la integrada por: Botasso; Tarrío, Delovo; Chalú, Minella, Belli; Curell, Arrillaga, Díaz, Demaría y Morgada; en tanto el goleador de la misma fue José María Minella, con 12 tantos (1 vs FSV Frankfurt, 4 vs TSV 1860 München, 3 vs Chemnitzer PSV, 2 vs Selección de Dusseldorf, 2 vs Ambrosiana) quien durante el transcurso de los partidos pasó de su puesto de “centre half” a integrar la delantera del equipo.

Otra atracción, fue la Hemeroteca Digital Tripera, una recopilación de más de 1000 artículos periodísticos que mencionan a Gimnasia, o Gymnasio, o a Gimnasia y Escrima, dependiendo del país de donde sea el diario en cuestión, en referencia a los partidos que iba disputando el primer equipo. La misma, también se nutre de las crónicas enviadas por el periodista Mario Sureda, dirigente del Club delegado en el viaje, miembro del Comité Ejecutivo de AFA de aquellos años y jefe de la Sección Deportes del Diario “El Argentino” de La Plata, uno de los periódicos de mayor tirada en la época en la ciudad, que transmitía diariamente el devenir del viaje, anécdotas y hasta curiosidades, como que Di Giano se encontraba triste por no recibir la correspondencia que esperaba.

Aquella, la gira más larga de un equipo argentino en la historia, fue el tercer viaje de un equipo de nuestro país a Europa; la victoria más altisonante fue, además de las conseguidas contra Real Madrid y Barcelona, aquella obtenida en casa del Sparta Praga, conjunto inexpugnable de la época, protagonista y campeón de la Copa Mitropa (antecedente en cuanto a competiciones entre equipos europeos respecta) y en el país del futuro subcampeón del mundo en 1934. “Fue la hazaña que no consiguieron ni Peñarol ni Nacional”, titularían los diarios, respecto de aquel triunfo.

Aquel viaje contó con partidos contra Marino y Real Club Victoria, campeones de la Liga Regional Canaria; versus el equipo fundado por Jules Rimet, Red Star de Paris; contra el Benfica (campeón portugués 1929/1930); visitas al Inter (campeón Serie A 1930) y al Napoli, con sendos empates, y con la particular situación que Internazionale se llamó en aquellos años Ambrosiana, dado que a Mussolini no le simpatizaba un nombre que pudiera relacionarse con la Internacional Socialista, en un encuentro donde se enfrentaron “dos estadios”: Minella contra Meazza. Sobre aquel día, dijo José María: “Meazza fue uno de los fowards que más trabajo me dio. Rápido y de óptima colocación, con singular habilidad”.

Del calor brasileño donde Gimnasia enfrentó al campeón Carioca y al campeón Paulista de 1930, y donde debido al mismo los partidos se disputaron de noche, otra rareza para nuestros jugadores; pasando al gélido clima alemán que en palabras de Delovo quedase así expresado: “Es el recuerdo más grato de nuestro paso por Europa. Nos habían dicho que en Munich ningún equipo había ganado por abultado score. La cancha estaba totalmente cubierta de nieve y cuando comenzó el match nevaba de forma copiosa. Se me congeló hasta la lengua, no podía ni hablar”, que hizo que los diarios de época dijeran que era la primera vez que un team nacional disputaba un partido bajo nieve.

Más de 4 meses de viaje, una travesía impensada en estos años, que incluso y dada la envergadura de la misma, hacía que se aunaran todos los esfuerzos para que sea transmitida como se merecía por los medios nacionales: “El primer gol transmitido por radiofoto”, fue toda una novedad para la época.

Con el aporte de grandes jugadores que llegaron a préstamo, alguno como Demaría que se quedó en el Club y a los pocos meses y dada su actuación en Italia, fuera transferido al mismísimo Inter; con un equipo de Reserva que se quedó disputando el torneo local, para salir entre los ocho primeros, ganándole incluso a River; sin Varallo, quien se encontraba a préstamo para realizar la Gira por América que efectuó Vélez; con un grupo de jugadores que atravesó ocho países, jugando prácticamente cada tres días; con distancias que al día de hoy nos quedan largas; con todo eso, la Noche del 11 de noviembre le dio un merecido homenaje y reconocimiento a aquellos nombres históricos tanto para Gimnasia como para el fútbol argentino en general, que protagonizaron aquella inolvidable gesta.